Surcos en cuarentena #7: «La Biblia» – Vox Dei (Fat Beats, 2013). Originalmente editado en Argentina en 1971.

¿Existirá un gesto más progresivo que adaptar musicalmente la Biblia? En 1971 lo hizo Vox Dei, una banda oriunda de Quilmes, periferia del epicentro rockero argentino que era su capital, Buenos Aires. Vox Dei antes había sido Mach 4, una banda de covers que cantaba en inglés. Antes de grabar cualquier cosa importante, los cabeza del sello Mandioca (casa discográfica de Manal, Pappo, Tanguito y Moris, entre otros) les pidieron dos cosas: cambio de nombre y letras en español. El nombre escogido fue Vox Dei, el cierre de la famosa expresión latina Vox populi, vox dei o lo que es lo mismo en español: La voz del pueblo, es la voz de Dios. Tal vez fue pura casualidad, pero la elección del nombre cobraría un nuevo significado cuando en 1971 tomaran la decisión de hacer un disco inspirado nada menos que en la Biblia, el texto sagrado del judeo-cristianismo.

La banda había debutado un años antes con Caliente (Mandioca, 1970), un disco que aún recogía las influencias de su etapa como Mach 4 con ciertos aires psicodélicos a lo Kinks y Byrds, dos de las bandas que formaron parte de su repertorio anglo. Para La Biblia (según Vox Dei) (Disc Jokey, 1971), el cuarteto formado por Willy Quiroga (voz, bajo), Rubén Basoalto (batería, percusiones), Ricardo Soulé (primera guitarra, voz) y Juan Carlos “Yodi” Godoy (guitarra rítmica, voz) evidenció una evolución notable en su sonido, acorde con lo ambicioso del proyecto.

Ricardo Soulé, el principal letrista e ideólogo del disco, pensó en algún momento en adaptar de forma literal ciertos pasajes bíblicos, pero desistió rápidamente al darse cuenta que lo que debía transmitir no era el dogma, sino lo que él -sin ser particularmente religioso- entendía del texto sagrado. Por lo tanto, abordó a los personajes bíblicos (Moisés, José, Jesús) desde sus perfiles más humanos, algo no muy lejano a lo que ellos mismos eran: jóvenes revolucionarios en un contexto político, social y cultural muy convulsionado.

El cuarteto original: Rubén Basoalto, «Yodi» Godoy, Ricardo Soulé y Willy Quiroga.

El país sudamericano vivía un proceso llamado Revolución Argentina, que no era otra cosa que el nombre con el que se autodenominó la dictadura cívico-militar en ese momento encabezada por Alejandro Agustín Lanusse. Como era la tendencia en todo el continente, la Iglesia Católica -o al menos amplios sectores de ella- se mostraron cómplices de la dictadura y estaban particularmente inquietos con lo que este grupo de «hippies» estaba haciendo con el libro sagrado. La curia de Buenos Aires se comunicó directamente con el sello y les exigieron que antes de publicar cualquier cosa, debían mostrarles las letras. No sólo pasaron la inspección, sino que además fueron alabadas por su sencillez y claridad; algo semejante a lo que le pasó a Pier Paolo Pasolini -ateo, comunista y homosexual- con su “El evangelio según Mateo” que fue elegida por el Vaticano como la mejor película sobre Jesucristo.

Como todo disco así de ambicioso y grandilocuente, las asperezas se evidenciaron y dejaron como primera víctima a “Yodi” Godoy, quien abandonaría las sesiones de grabación quedando como única evidencia de su paso por el rock argentino 7 de las 8 pistas de La Biblia. Paradójicamente su renuncia fue antes de abordar la última canción del disco: el “Apocalipsis”. A esa altura de su carrera, recién su segundo disco, Vox Dei no era un colectivo especialmente virtuoso. Como ellos mismo siempre lo manifestaron, eran una banda de barrio que abordaba el rock de una forma intuitiva, primero por imitación y luego con mucha improvisación y búsqueda. Por eso el gran mérito de La Biblia (según Vox Dei) es que pese a ser un disco con un pie forzado tan estructurado (los pasajes de la Biblia) tiene frescura, libertad y un enorme sentido melódico en sus canciones, algo que no es siempre un sello característico del rock progresivo y sus serpenteantes estructuras.

El trío que sobrevivió al Apocalipsis: Basoalto, Quiroga y Soulé.

Sin tener ninguna de ellas una forma de verso-coro y descontando los pasajes instrumentales “Cristo, nacimiento” y “Apocalipsis”, las canciones (o movimientos si la concebimos como una ópera rock) que ocupan las 4 caras de La Biblia (según Vox Dei) siempre otorgan momentos melódicos muy reconocibles imprimiendo a todo el disco una identidad sonora única. No es casualidad que Soda Stereo, la banda ícono del rock/pop latino, hiciera suya “Génesis” para el -a esta altura- clásico Unplugged y la respectiva gira americana de Comfort y música para volar. Pero hay más que sólo el génesis: en la luminosa “Moisés” se sienten esas guitarras de sus queridos Byrds versión Fifth Dimension; en “Las Guerras” se despachan un épico hard rock (un año antes del «Highway star» de Deep Purple) que culmina con una descarga sonora que recuerda a Hendrix y Townshend en sus momentos más autodestructivos sobre el escenario, en un final plagado de destrucción y sangre: un sello de las siempre cruentas batallas bíblicas. Pero es “Libros sapienciales” el track que los historiadores de rock han elevado como el momento clave del disco, donde el melancólico violín ejecutado por Ricardo Soulé define un sonido que la ha posicionado en distintos medios como unas de las 100 mejores canciones del rock argentino.

En suelo sagrado: Vox Dei en formato trío en alguna iglesia de Buenos Aires defendiendo el tema más hard rock de todo «La Biblia»

Vox Dei es hoy por hoy una de las bandas más reconocidas del rock trasandino. Se mantienen activos gracias al empuje de Willy Quiroga, aunque como suele pasar con los longevos proyectos musicales, hay varias disputas legales por el uso del nombre, principalmente con Ricardo Soulé quien luego de ir y venir dejó la banda definitivamente en 1998. Rubén “El pulpo” Basoalto murió en 2010 a los 62 años.

La Biblia (según Vox Dei) es un disco con tantas (re)encarnaciones (o resurrecciones si seguimos el patrón bíblico) que cuesta seguirle la pista. En 1974 fue versionada y grabada por el Ensamble Musical de Buenos Aires una épica iniciativa de Billy Bond que reclutó para estos efectos a Charly García, David Lebón, Miguel Cantilo, Nito Mestre y Raúl Porchetto, entre otros. Luego destacan las versiones en vivo de 1986, 1997 y 2013 a cargo de los mismos Vox Dei, además del muy interesante La Biblia: Los manuscritos, una edición especial que rescata del olvido varios demos, temas descartados y versiones instrumentales.

Como dato curioso, mientras se terminaba de masterizar el disco, el sello Mandioca quebró y la publicación del LP quedó a cargo del sello Disc Jokey que cometió dos crasos errores: acortó “Apocalipsis” y en la impresión intercambió el orden de “»Libros sapienciales» con «Profecías» lo que provocó que hasta hoy hayan versiones en Youtube o Spotify que confunden los dos temas o de lleno eliminan la versión original de “Profecías”.

*La versión reseñada en esta entrada es la reedición de lujo (gatefold de alta densidad, fotos y notas interiores) de los estadounidenses Fat Beats, sello especializado en hip-hop, otorgando otro halo de misterio a La Biblia y sus múltiples e inescrutables caminos.

1 comentario en «Surcos en cuarentena #7: «La Biblia» – Vox Dei (Fat Beats, 2013). Originalmente editado en Argentina en 1971.»

  1. Es falso de toda falsedad decir Godoy se fue en medio de la Grabacion…Me fui después de CARNAVALES 1971 con La Biblia perfectamente terminada…Si saber que luego de mi partida me falsificaron TODAS MIS FIRMAS en los Registros de la Obra y Armaron un Contrato falso ARTISMO para hacerme ceder mis derechos HASTA HOY para que Soule se quede con el 70% de La Obra. //Firmado Juan Carlos Godoy compositor de ka música de la Biblia según Vox Dei Documento identidad 8.352.991

Deja un comentario